Buenos días hermanos y amigos moteros!
Bienvenidos un mes más a nuestro artículo de conducción, donde este mes tratamos un tema bastante importante si gozamos de compañía en nuestras rutas: La conducción con un acompañante.
Muchos de nosotros rodamos con nuestras mujeres, amigos o familiares en numerosas ocasiones. Por ello, es importante conocer una serie de consejos que nos harán el paseo mucho más llevadero.
Que no haya ninguna duda
Si es la primera vez que montas como pasajero, no te preocupes, todos hemos sido “prospects” en ello. No dudes en preguntar como agarrarnos, subirnos, cuando hacerlo, cuando bajarnos y todo lo que necesites saber. En la actualidad, disponemos de intercomunicadores que hacen una conversación en moto entre piloto y pasajero mucho más fluida, pero no es recomendable preguntar demasiado sobre la marcha, por lo que se recomienda tener la lección aprendida antes de subir.
Moverse siempre con el piloto
Ya hemos pasado esas dudas iniciales, estamos subidos y en ruta, por lo que ahora debemos de saber que siempre hay que acompañar los movimientos a los del piloto. Esto es bastante complicado al principio, ya que el instinto nos lleva a hacer lo opuesto, o quedarnos estáticos.
Si no acompañamos al piloto, estaremos obligándole a realizar un mayor esfuerzo para controlar la moto, ya que se verá afectado el centro de gravedad de forma inesperada.
¿Cómo nos subimos?
Teniendo claro que existen mil maneras y opiniones al respecto, la más “correcta” siempre será apoyar un pie en la estribera o plataforma, dando un leve salto apoyándonos en el piloto y alzando la pierna contraria hasta colocarla en la otra parte. Antes de realizar esta maniobra, debemos cerciorarnos de que el piloto este apoyando completamente los dos pies en el suelo, o podríamos tener problemas indeseados.
No apoyarse sobre el piloto
Cuando somos pasajeros, lo ideal es tener independencia del piloto. Nuestro peso debe estar repartido entre las estriberas y nuestras manos apoyadas en un punto fijo. Es obvio que durante la marcha, pueden surgir cosas tales como echarse encima del piloto, o un choque casco contra casco al reducir la velocidad, pero se tratan de situaciones normales que no deben preocuparnos.
Tratemos de disfrutar de la ruta
Como casi todo en esta vida, en nuestro primer viaje como pasajeros, estaremos haciendo todo secuencialmente, intentando no dejarnos ningún paso en el olvido, pero no te preocupes, cuando cojas experiencia, todo se hará de un modo más automático que nos liberara de gran parte de la presión inicial.
Lo importante es no estar tensos durante el viaje, y disfrutar del paseo, que es el objetivo final de una ruta en moto. Y si montas en moto, llevando a Cristo contigo, el beneficio y el disfrute os aseguramos que será doble.
Esto ha sido todo por este mes, nos leemos el mes que viene. Si os apetece, podéis dejarnos vuestras anécdotas piloto-pasajero en los comentarios.
Que Dios os guarde en la carretera!
Un comentario sobre “Conduciendo con acompañante”